Las constantes lluvias de este invierno hicieron que la estructura no resistiera y se desmoronara impidiendo el paso vehicular hacia la zona residencial Rocas Negras.
MIRAMAR (Corresponsal).- Los arroyos que atraviesan todo el distrito de General Alvarado, en muchos casos vienen de la zona serrana de Balcarce con un caudal tremendo por las continuas lluvias de este invierno que ya superaron largamente la media anual.
Dentro de este panorama climático, durante el último fin de semana se produjo la caída del puente de “La Tigra” a pocos metros de la desembocadura en el mar. La estructura quedó inutilizable y hasta que baje el nivel del agua el municipio decidió cercar la zona para luego analizar que trabajos de reparación se deberán encarar.
Cabe señalar, que ese paso comunica la zona costera desde la parte más urbana hacia el barrio residencial “Rocas Negras”, que evidenció un gran crecimiento edilicio los últimos años. De todas maneras, por ahora el tránsito vehicular en esa zona quedó totalmente obstruido, obligando a los vecinos a pegar una vuelta más incómoda para salir o arribar a sus casas.
El puente fue inaugurado en diciembre de 2014 y desde el primer momento fue mirado con desconfianza por muchos habitantes marsureños que dudaban de su integridad debido al bajo nivel, pese a los tubos de drenaje colocados la altura de la calle 11.
La obra fue encabezada ese entonces por la Secretaría de Planificación y Ambiente, donde “fue colocada una carpeta asfáltica con protección en bordes para prevenir accidentes, quedando un paso seguro para los vecinos y visitantes”, de acuerdo a lo especificado en aquel momento por el titular de esa dependencia, Federico Arias.
Además, según se informó, personal del Ejército Argentino fue encargado de reforzar la estructura., al igual que otros puentes que habían quedado destruidos tras la grave inundación de 2014.
A través de las redes sociales, los habitantes de la villa balnearia expresaron sus sensaciones, donde en muchos casos criticaron la obra al considerarla “endeble”, mientras que otros fueron más cautos al determinar que debe bajar el agua para que la comuna haga las refacciones pertinentes.
Otro de los inconvenientes registrados por las adversas condiciones climáticas que vienen registrándose en la zona, fue la inundación del cementerio de Nicanor Otamendi.